Quizás Loulé no te suene, pero es una ciudad con un centro histórico bonito, animada por sus mercadillos y con toda la esencia de Portugal. Todos estos atractivos la convierten en una ciudad perfecta para hacer una excursión. Nosotros la visitamos durante una mañana, cuando nos alojábamos en Faro, se encuentra solo a unos 20 kilómetros de distancia.

Qué ver en Loulé

Castillo de Loulé

En el interior del castillo se encuentra el museo de arqueología. Es un museo pequeño que ocupa solo un par de salas, pero tiene una interesante colección de hallazgos de la Edad de Bronce y de cerámica romana.  

La entrada para acceder al castillo y al museo es de 1,62 euros.

Mercado de Loulé

Los sábados por la mañana, en los alrededores del mercado, hay mercadillo, por lo que te recomendamos que dejes tu visita a Loulé para este momento y así vivir la auténtica esencia del lugar. Una parte está llena de puestos de fruta y verdura y, por otro lado, los puestos son de artesanías y otros productos. 

Capilla de Nossa Senhora da Conceiçao

Ayuntamiento y Torre del Reloj

Lo mejor es dejarse llevar por las callejuelas que mantienen el encanto de su pasado medieval. Si tenéis suerte, podréis ver a los comerciantes trabajando en sus casas.

Rua 5 de outubro

La calle finaliza en una bonita plaza, con más bares, donde además, encontraremos otra iglesia, la de São Francisco. 

Iglesia matriz de São Clemente

La iglesia es del siglo XIII y, en su interior, se pueden ver dos bonitas capillas, una repleta de azulejos y la otra con un arco manuelino.

Nos la encontramos en obras, por lo que no pudimos entrar al encontrarse cerrada al público. 

Justo enfrente de la iglesia, hay una pequeño jardín con baños públicos.